¿Querés comer habas plantadas por vos mismo? (Dificultad, media)

Como buen nieto de genoveses, como zeneize al palo, me gustan (más que gustarme, las considero exquisitas) las habas crudas, tiernas, dulces y acompañadas por rodajitas de fuet y una copa de Malbec. Excelente entrada (o tapa), a mi criterio.

.

Habas frescas servidas como tapa.

Todo aquel que tenga un cantero con una profundidad de 25 cms, pegadito a una  pared orientada al norte y bien soleada, puede cultivar habas.  Es una planta trepadora herbácea, anual, de tallos semi-erectos que se enredan; tiene porte recto y erguido, con tallos fuertes y angulosos de hasta 1,6 metros de altura.

Habas en flor

Se plantan 2  semillas en cada hoyo a una profundidad del doble del tamaño de la semilla, en este acaso a 3 a 5 cms. de profundidad, separados los hoyos entre sí a 20 cms.  Las habas a plantarse son las secas que se  compran en los comercios que venden estos productos o en el Barrio Chino. El poder germinativo dura de 4 a 6 años. En la semilla comercial el porcentaje mínimo de germinación es del 90 por 100.  El temprano otoño es la época de siembra. Cuando brotan la plantas hay que ralear, es decir dejar solo la planta más fuerte de cada hoyo plantado para evitar el raquitismo. El riego debe ser abundante.

Las plantas crecen rápidamente durante el otoño e invierno. Cuando pasan la altura de 30 cms. hay que ayudarlas a mantenerse erguidas con hilos fijados a la pared o estacas de un metro (palos de escoba viejas sirven)  clavadas en el piso si están en un centro.

Luego de la floración, aparecen las vainas por los meses de julio y agosto. Cuando las vainas están maduras, desde fines de agosto en adelante es el momento de la cosecha gradual, ya que es una planta prolífica.  Luego de un golpe de heladera, se pueden comerlas acompañadas como dije. No aconsejo pelarlas de antemano, como hacen las mujeres, generalmente bolivianas que las venden en bolsitas en la Ciudad de Buenos Aires, porque pierden esa maravillosa humedad que les proporciona la vaina, que es peludita por dentro.

Las habas son muy tienas; una vez extraidas de la vaina se las ingiere directamente. Solo es necesario extraer la cobertura del poroto en el haba comercial y grande, que es indigesta si no es cocinada.

¿Querés comer rabanitos plantados por vos mismo?

Empiezo esta sección con el cultivo de rabanitos porque es el más sencillo. Solo se necesitan una o más macetas que permitan una profundidad de la tierra de 10 cms. El ancho y largo serán determinados por el espacio y la disponibilidad. Las macetas deben contar con agujeros para el correcto drenaje. A fin de evitar que se escurra la tierra por ellos, semitaponar con unos cuantos trozos de leca. (particulas de arcilla horneadas utilizadas comunmente en la industria de la construcción)

La tierra a utilizar es la que venden en los viveros o hipermercados, mezclada con algo de arena y resaca a fin de que quede suficientemente esponjosa al tacto. Las semillas -y esto vale para todas las semillas de todas las plantas- deberán plantarse a una profundidad del doble de su diámetro. En este caso a aproximadamente 1,5 cms. de la superficie. Hacer un hoyito con un lápiz y poner 2 semillas en cada uno. Cada hoyo a 7 u 8 cms. de distancia del de al lado. Regar con regadera de flor fina o pulverizador y poner a la sombra hasta que broten las primeras hojitas, cuidando que siempre la tierra esté húmeda. Una vez brotadas las hojas, poner las macetas al sol -debe darle casi todo el día, por lo que hay que ubicarlas en un lugar orientado al norte- vigilando que la tierra no se seque.  Desechar las plantitas más debiles si las dos semillas brotan (este proceso se llama ralear, y es importante sino las dos serán raquíticas) Transcurridos aproximadamente 30 días (echar una ojeada previa), cosechar y comer.

Los rabanitos se cultivan en cualquier estación del año. Las semillas se consiguen en semillerías. Existen distintas variedades de rabanitos, pero es  similar su cultivo.